Trigésima novena película

Cinema, aspirinas y urubúes, de Marcelo Gómes, Brasil, 2005.

 

Una respuesta to “Trigésima novena película”

  1. Betty Says:

    Cine,aspirina y…cierre de un ciclo

    No puedo editar las imágenes que atraviezan mi cerebro cuando veo las imágenes de “la sorpresa prometida”…
    No puedo editar las imágenes que los cuerpos( que me obligo a ver,intentando una fortaleza que no tengo) me lleven al cuerpo fresco en la retina que dejé hace horas a muchos kilómetros de aquí(sólo yo entiendo esto…discúlpenme).
    Daney dijo que el cerebro funciona como un segundo aparato de proyección,que aísla la imagen dejando a la película y al mundo ,seguir sin ella. No pude evitar el fundido encadenado de imagen- pantalla ,imagen- recuerdo…Mis ojos…nubes descosidas inundando el microcine.
    Al poco rato también de la mano de Sergei se constató otra de sus grandes verdades :la metáfora mísma del cine…todo es visible para todos .Pero quienes lo desean pueden ver mas cosas(ver-sentir).
    Así fue que a poco de haber desmadejado mi sentir…prorrumpí en la más curativa risa “de patán”…Fresca y curativa. Es que ocurrió un blooper.
    Mientras en “cine y aspirinas…” en la pantalla se leía :”no puedo dormir…”,en ese preciso instante unos sonoros ronquidos,(de origen ignoto) desmentian la frase : en el microcine, “alguien podía dormir”.
    Fue magistral. Mágia.
    Es la magia que me lleva a transitar esta vida demasiado ”drama” con un poco de compañía. Es real…Cuando salía de visitar a ese cuerpo que dejé en su indignidad…salía destruída e iba a construirme a media cuadra ,donde acontecía un festival de cine latinoamericano….El plano es la crueldad ,la obligación de no huir ,de no esconderse ante lo que es y que sólo el cine ha podido domesticar .La luz que acusa,la luz que salva…Más de Daney…y yo no huía y me dejaba domesticar,salvar…
    En el transcurso de pocos minutos…y gracias a los urubúes… pasaba a agradecer no poder “editar ”los pensamientos que comenzaron a deambular sobre ese “papito” (único sinónimo potable) alemán que se bañaba ante mis ojos(y para mi deleite)en cámara.
    A parte de haber reido a lo patán ,ahora “tocaba” a ese maravilloso extranjero rubio en el calor abrazador de ese Brasil de pre-guerra
    Una película que (dejando de lado el alboroto de mis ratones)mantenia en la blancura de su imagen una claridad formal impecable…un devenir de los cambios que se nos vienen encima cuando creemos estar seguros, lejos de ellos(“vine aquí…porque aquí no caen bombas…”,”mi identidad dependia de mis papeles…ahora, me deshago de ellos” un nadie más(aunque no fácilmente ocultable con esos germanos atributos))

    Una de las tantas cosas a agradecer de este curso :con él logré uno de los objetivos que tenía al ingresar: cómo acercar un poco(mucho)este cine que no se estrena, cine que no se ve, a mis alumnos.
    Sergei fue el primer paso .Un encuadernado de treinta y tantos escritos y dibujos de alumnos de cuarto año del Micono(Villa Giardino) sobre trozos de su “Perseverancia”,es el primer resultado. Esos mísmos cuarenta y dos alumnos yendo a cineclub en grupo…Agradeciendo sorprendidos “ la posibilidad” de cineclub en grupo…la experiencia(para el 80 por ciento de ellos un cineclub era un club donde se pagaba para ver cine…e iban unos pocos)
    Pero también ser parte de un maravilloso grupo de gente que ama el cine como yo.
    Participar (bue…cuando el ojo se distraía y me dejaba meter un bocadillo…tenia que decirlo)participar en debates… cuando nunca lo he hecho por placer en mi vida.
    Pero remitirme a lo que en realidad significó este año compartido …Lo haré de la manera en que ,después de ver la película de Fito Paez le explicaba a mi mejor amiga :yo que habia visto peliculas que no se estrenan ni se ven por tres años o más…no pensaba que me pudiera aportar el hecho de hacer un curso que llevaba como título esa bandera. Y me equivoqué.
    Vi el mundo y la maquinaria con que el ser humano actua desde la butaca no –comercial de realizadores no-espectáculo.
    Roger-ojo es un magnífico descubrimiento como profesor…(lo digo despacito ,para que no se agrande…)Quijote que nos lleva de la mano…nos empuja con Rosembaum,Daney o Godard…Martillea el cerebro con Wittgenstein…pero al fin uno termina pidiéndole prestado su Tractatus.
    Abre cabezas…al igual que el cine que nos desnuda con cada nueva película en esa pantalla breve de cemento blanco Pero no son las películas solas las que nos cambian,es el Ojo-Profe y el debate y los text os. Una nueva manera de mirar…con toda la esperanza de mi parte en que sea una nueva manera de que nos miren y “me mire”…Una manera de mirar que me enseña a tocar incansablemente con la mirada a qué distancia de mí, estaba el otro(más Sergei)
    Gracias Roger .Gracias compañeros del curso .Gracias cine…por existir y curarme…
    Betty Font 2/12/07

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